jueves, 25 de febrero de 2016



Para poner en contexto la respuesta que da Bolla, es necesario decir que unos años más tarde de que iniciara la revolución rusa, muchas personas que eran incompatibles con dicha causa, comenzaron a emigrar a diferentes países, pero en especial a Francia. Dentro de las personas que emigraron se encontraban burgueses, aristócratas, clérigos, académicos, etcétera. Ahora, los tales señores son, claro, a los que se refiere nuestro camarada, los burgueses y aristócratas. 

Si pudiéramos observar el interior de Bolla, muy seguramente, encontraríamos que su sangre es de tipo bolchevique, revolucionaria, elgelsiana, y, por ende, detesta a todos los traidores, enemigos, de la revolución socialista. 

El profesor cree que su descubrimiento no es tan importante o le resta importancia no tanto por el experimento en sí, sino que se debe al resultado; el bolchevique de Bolla. Si en lugar de trasplantar la hipófisis de un revolucionario hubiese sido la de un genio de las letras, el piano, la pintura, sin duda que el pecho se le hincharía y su ego llegaría al techo de su departamento. Por tanto el desenlace sería totalmente contrario. 

Ahora, creo que descubrir que lo que nos hace humanos se encuentra en la hipófisis, no es poca cosa. El profesor tiene su mérito, claro. 

Hay que destacar que si Bolla conservara su corazón, seguramente, seguiría siendo un perro noble, seguiría preocupándose por la chica que mal come, seguiría aborreciendo al cocinero que lo hirió y a los porteros, seguiría buscando refugio del frio y del calor, seguiría aprendiendo nuevas palabras, seguiría buscando un hogar y a un camarada.  

Fueron varias cosas las que hicieron que los doctores decidieran regresar a Poligraf a su estado anterior; perro: robo, alcoholismo, guerra ideológica, intento de violación a Zina, mal carácter, problemático. Pero, el detonador fue que Bolla los de denuncio al partido, sin embargo, debido a que el profesor tenía tratos con altos funcionarios de éste, no procedieron. De no ser así hubieran acabado como los gatos.  

Sin duda que los doctores siguieron experimentando con otros animales, quizá con Bolla, ya que por el anterior experimento supieron que la hipófisis era la clave, así que se pusieron manos a la obra. Es más Bola percibe lo siguiente: "veía cosas espantosas; me imagino que sangre, vísceras, cerebros, cuerpos inertes.  

Corazón de perro 

El libro Corazón de perro de Mijail Bulgákov nos narra la vida de un desdichado perro que se la pasa sobreviviendo a las inclemencias del tiempo y de las personas y del hambre. Él ha visto como la guerra, el hambre y el frio se han llevado a varios. Pero su suerte cambia al toparse con un doctor burgués que vive en un departamento lujosos con siete habitaciones, y que decide alimentarlo y "adoptarlo". Aunque el doctor lo trata y lo alimenta bien, Bola no deja de intuir que hay algo detrás de todo el repentino cambio de su vida.  

Un día se presenta la oportunidad de que el doctor le trasplante a Bola la hipófisis de una persona recientemente muerta, sin saber que la personalidad del occiso es la de un bolchevique, que desatara una tormenta de sucesos... 

Aunque se tenga la impresión de que la historia va de la vida de un perro y su posterior transformación, lo cierto es que hay detrás una tira al socialismo que se implemento en la Unión Soviética. No se trata de una crítica al socialismo en sí, sino a la tergiversación del mismo, y a la idealización de algunos conceptos. Por ejemplo que el proletario sólo por el hecho de serlo, era puro y justo, mientras que el burgués, por sus origen, era impuro y enemigo del progreso social, cosa que no es una regla. 

Para finalizar, la historia me pareció muy buena, con su buena dosis de drama y comedia negra. 

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