martes, 23 de junio de 2015

Segunda Sesión Bel Amie



Desde el inicio del texto nos damos cuenta de que Duroy es un hombre ambicioso, que anhela salir de las precarias condiciones en las que vive, al sólo contar con un trabajo mal pagado en los ferrocarriles. Pero él ansía conocer el mundo burgués: las cenas, las comodidades, la ropa, las mujeres, las casas, etc., codearse con personas “refinadas” y de un poder adquisitivo alto, mismo por el cual Duroy piensa que están por encima de él. Esto va generar que nuestro personaje desarrolle unas enormes ganas, casi cayendo en obsesión, en subir de estatus social y, al no contar con los medios, como él lo dice, su única opción –como él ve la situación- es convertirse en un vividor oportunista.

Me parece que más que suerte con las mujeres, lo que Duroy genera en ellas es atracción hacia alguien bien parecido. Sin embargo el empaque no basta para retener a las mujeres, tal pareciera que lo que contiene también es importante. Así pues, a Duroy le hace falta la práctica, ser observador, tener tacto, saber enfrentar situaciones adecuadamente, ingenio, asertividad, visualización.

Maupassant, describe el mundo periodístico como un negocio que busca crear opiniones, mal informar, crear tendencias, puntos de vista, que beneficien sus negocios y a sus socios; más que comunicar por un bien común, ya ni digamos éticamente, busca tener un brazo armado, mercenarios de la pluma, que hagan lo necesario para que su poder se mantenga intacto, o por lo menos con altas ganancias. Y, como consecuencia, se les paga bien a los lacayos.

Creo que ambos personajes son tal para cual, como bien lo menciona la pregunta, porque ambos tienen parejas alternas con las cuales se ven. Ahora, si bien la señora Marell está casada, lo que le molesta de su amante no es que éste tenga otra pareja, sino que sea pagada con su dinero, lo que daría paso a que sólo la utilizaron para obtener plata, lo cual no estaría del todo errado, verdad.

La señora Forestier más que ser amiga de Duroy, creo que está viendo por sus intereses. Al decirle que visite a la señora Marell y después a la esposa de Walter, está moviendo sus fichas para obtener información que le puedan dar el jaque. Pues como hemos leído en la historia, la infidelidad era mal vista por la sociedad, generando grandes escándalos. Hay una frase que dice que la información es poder, es precisamente lo que la señora Forestier pretende.





lunes, 15 de junio de 2015

Primera Sesión de Bel Amie



De entrada, seguramente debe de haber hombres que se casen con alguien por su dinero. No creo que sea sólo una condición que popularmente se les ha atribuido a las mujeres. Lo cierto es que en muchas sociedades  es mal visto que un hombre no sea el proveedor de recursos, porque dentro de las distintas culturas existen roles que previamente se han venido repitiendo y, que se les han asignado tanto a hombres como a mujeres. Aunque debo decir que los roles han estado cambiando, o ¿no?

Ahora, también se puede dar el caso de que no sea como lo anterior, es decir, que se repruebe tal acción del hombre y que, por el contrario, sea mayormente tolerada, a diferencia de las mujeres, porque dentro de las sociedades sigue habiendo desigualdad de género.

Considero que la gente guapa tiene algunas ventajas en la vida como lo dice el artículo: pueden conseguir mejores chambas, relacionarse con personas adineradas, han tenido infancias más felices que las personas asimétricas, son bien vistas por la sociedad. Tal pareciera que las personas seguimos inconscientemente leyes evolutivas que dictan lo anterior. No obstante, considero que los humanos somos capaces de salirnos de lo preestablecido-genéticamente, así como hemos roto la ley que nos decía que el sexo era sólo para tener descendencia-como las demás especies-, ahora lo podemos utilizar para darnos placer mutuamente y, si se decide, para no tener descendencia. Hemos roto en varias ocasiones lo que la naturaleza había establecido siglos atrás. Así, las personas podemos romper lo establecido cuando hacemos consciente lo inconsciente.

A mí me parece un verdadero desperdicio el que alguien decida  no obtener conocimientos, porque éstos han formado y han permitido que nuestra especie avance. El conocimiento te permite salir de las aguas pantanosas de la ignorancia, te abre mundos inimaginables, expande tu mente y tus sentidos cual si fueran constelaciones de estrellas; te permite entender muchas cosas, para dejar de ser un prisionero.

Para las clases altas de nuestro país es preferible y más importante conocer a las personas “adecuadas” para hacer negocios, “conectes”, alianzas. Sólo basta ver como hay incompetentes en altas cargos, la política es el más claro ejemplo, pero no el único, en donde el papá o la mamá hicieron alguna llamada, donativo, favor, para que su hijo (a) fuera diputado, senadora, presentador, ejecutivo, secretario. Porque cuando una analiza a las clases altas, se da cuenta que son las mismas familias que quieren seguir controlando. ¿Seguirán o caerán?

Bueno, eh, creo que “un buen amigo” es aquel que te permite ser quien eres, no tienes que ponerte ninguna otra personalidad que utilizas con los demás. Existe una confianza mutua. Pueden pasar varios meses o incluso años sin verse, pero cuando se vuelven a ver, las cosas transcurren como si no hubiera pasado ese lapso de tiempo.  




sábado, 6 de junio de 2015

Tercera Sesión Como agua para chocolate



Más que hablarnos del matrimonio en sí, creo que la escritora, su intención es, retratar y cuestionar a la vez, cómo las personas seguían y siguen aplicando el uso de costumbres sin reflexionar sobre ellas, aceptándolas como inamovibles, sólo porque hasta la fecha se han venido realizando de esa manera, cual si fueran verdades absolutas. No existen verdades absolutas, al menos en el mundo del conocimiento. No acaso Tita decide ser infeliz porque prefiriere seguir con la costumbre de respetar las decisiones de una idealizada madre. Pedro quien dice amar a Tita, a caso no prefirió seguir con la decisión de mamá Elena, en lugar de cuestionar tan descabellada costumbre. Y así, varios de los personajes dejan decisiones propias en manos de otros. El matrimonio visto como una transacción en donde ambas partes se benefician, da estatus, felicidad, aleja a la soledad, es sólo un reflejo de algo más profundo de la sociedad mexicana. 

Mamá Elena sufre del síndrome de si me jodieron la vida a mí, yo se las joderé a todos. Le molesta ver que otras mujeres puedan tener el amor que a ella le fue negado. 

Como lo han venido mencionando antes algunos de los camaradas, considero que Tita está en un punto medio. Pues por un lado no se puede, o no quiere, dejar a un lado lo que su madre y la sociedad le han inculcado; y por el otro, no se anima a tomar las riendas de su vida, sin importar en qué dirán.

Sin duda la que me cayó mejor fue Gertrudis, ya que rompió muchas de los conceptos que se tenían y tienen sobre la mujer. Digo tienen, porque, aunque parezca que nuestra sociedad ha avanzado, aún sigue siendo una sociedad conservadora y mojigata.

Tita elige a Pedro en lugar de John porque desde su adolescencia lo había amado, pero como era la hija más pequeña se tenía que quedar a cuidar a su madre. Así, el tener una pareja sentimental le estaba vetado. Por consiguiente, dentro de su mente se fue programando para no amar a nadie más, al mismo tiempo que idealizaba al único amor que le era conocido, Pedro. Porque seamos honestos, John era mejor persona que Pedro. O, tal vez si haya un amor único para cada persona, y cuando se encuentran, nada más importa.

A mí me gustan los finales que se apartan del vivieron felices para siempre, se me hace artificial, porque sabemos que la vida es más complicada y que toma distintas variables. De ahí entonces que el final me pareció adecuado para dos personas que han estado en contacto con la tragedia.

En el fondo Tita sabía que ya no iba a poder soportar otra crisis amorosa, vivencial y existencial. No tenía más motivación en la vida, pues había quemado todos los cerillos que le correspondían. Además, creo, esta vez no se iba a separar de su amado. Y como su fuego se estaba apagando, decidió reavivarlo  con el rancho y con su cuerpo.


Como agua para chocolate.

Desde hace algún tiempo supe de la existencia del libro, que posteriormente adaptaron a película. Recuerdo que incluso la transmitieron por le canal 11 o 22 de la televisión pública. Pero, la verdad no había sentido curiosidad-interés por llevar a cabo alguna de las dos acciones.

Tengo la firme creencia de que algunos de los libros y/o películas llegan en el momento exacto. No antes ni después. Ese fue el caso de Como agua para chocolate.

La historia que se nos presenta en el libro, es maravillosamente exquisita, tanto por el contenido literario como por las recetas y su preparación. Se nos muestra un mundo espectacular, circundado por emociones, experiencias, amor-odio, tristeza-alegría y, desde luego, comida.

Así pues, uno puede sentir la excitación, el calor, al probar la codorniz bañada en infusión de rosas; siente al cuerpo arder como Gertrudis, al pensar en el deseo carnal. También puede sentir la añoranza de aquel amor que pudo ser y no fue, tal vez, porque no tuvimos el valor para declarar nuestros sentimientos; y todo por un pastel que contiene lagrimas de Tita.

Casi al final del texto, nos enteramos que por fin Tita y Pedro se podrán amar sin importarles el qué dirán de la sociedad mojigata. Lo hacen. Y, por consiguiente, todos los cerillos que poseían, se encienden, mostrándoles un lugar, un túnel que los llevará a un sitio que está más allá de lo tangible, un lugar lleno de luz, en donde se amarán, la muerte chiquita, dicen.