A medida que avanzamos en la
lectura, nos vamos enterando de la mala reputación que se ha ido forjando
Wickham; con creces. No es la persona que les ha hecho creer que es a la
mayoría de las personas, sino que es toda una fichita. Le gusta el juego y apostar
dinero que no tiene, es un mentiroso, un deudor, poco fiable, le gusta
engatusar a mujeres que presenten algún beneficio para él, etc. Con semejantes
puntos a su “favor”, la verdad, es que considero que muy pocas personas o
nadie, confiarían en él. Ah, sin olvidar que tiene dieciséis años con la que
huyo.
Ahora, para Jane y Elizabeth que
tienen conocimiento de lo anterior, les resulta muy riesgoso que su hermana se
involucre sentimentalmente con Wickham. Pues saben que la forma de ser de
ambos, además, no puede derivar en algo bueno.
En la historia también hay cierto
riesgo de que Lydia huya con Wickham, no porque haya un peligro físico, sino
que se debe a toda la clase de habladurías que generaría/generó dicho evento.
Asimismo, si lo acontecido entre
Lydia Y Wickham, la fuga, se diera en la actualidad, sin duda que no habría
tanto escandalo en el qué dirán. Sin embargo si sería muy peligroso, ya que hay
personas que engatusan a mujeres para explotarlas. Nuestro país está plagado de
desapariciones de mujeres.
El Sr. Bennet nunca se
responsabilizó al cien porciento de la educación de sus hijas, dejo que cada
una se formara como pudiera, que hicieran lo que les viniera en gana, eso si,
siempre y cuando no lo molestaran, que no lo sacaran de su santuario, de su
biblioteca.
Sin duda que hubo un acuerdo entre
Darcy y el señor Gardiner, de que no se revelaría que el primero se haría cargo
de todo, con tal de que se casaran Lydia y Wickham. Esto porque Darcy se sentía
culpable de no haber revelado las actitudes que cometió Wickham en el pasado,
lo cual evitaría que una muchacha le amase o confiase en él.
Lady Catherine no quiere que su
sobrino se case con Elizabeth por las siguientes razones:
- Desde su infancia han sido destinados el uno para el otro, según ella.
- Es/fue el mayor deseo de ambas madres.
- Elizabeth es una muchacha de cuna inferior, sin ninguna categoría.
- La señorita Bourgh es la ideal.
- Entre otras tantas.
Con respecto a Elizabeth, sin duda
diría que es una mujer feminista, pues su forma de pensar y analizar las cosas
y las situaciones le hacen merecedora de dicho termino. El debate que tuvo con
Lady Catherine me pareció muy bueno. La única mujer que se atrevió a
cuestionarla.
Dentro de la historia hay tres
matrimonios de la familia Bennet, que se dan por diferentes razones; el primero
es el de Lydia y Wickham, el cual se da por interés de uno y enamoramiento del
otro. Como sabemos no terminó bien; el segundo es el de Jane con Bingley, este
matrimonio presenta algunas características que el señor Bennet detectó: “Vuestros
caracteres son muy parecidos. Sois tan complacientes el uno con el otro que
nunca resolveréis nada, tan confiados que os engañará cualquier criado, y tan
generosos que siempre gastaréis más de lo que tienes; el tercero; Elizabeth y
Darcy se han sobrepuesto de la etapa del enamoramiento, en la cual nuestras
percepciones sobre la otra persona están trucadas, porque dicho evento no nos
permite ver cómo es en realidad la otra persona, ya que nuestro cerebro nos
inunda con drogas naturales. Pero el afecto de ambos no es cuestión de un día,
sino que han resistido la prueba de muchos meses, lo que les permitiría conocerse
mejor, sin todo el coctel de sensaciones de nuestro cerebro.
El final de la historia no me
sorprendió tanto, ya que más o menos intuía los posibles desenlaces.
Creo que el final si es un poco el
de cuento de hadas. Considero que en la vida no todo es felicidad y risas y
momentos placenteros, hay siempre o casi, situaciones que nos hacen trastabillar,
que no llevan al límite. A menos, claro, que simulen como muchas parejas lo
hacen.
Orgullo
y prejuicio
El libro retrata en sentir de una época
en la que el casarse era lo más importante para la mayoría de las personas.
Lograr esto atraía las miradas y las menciones de la sociedad. Sólo que las
personas, en muy contadas ocasiones, se casaban “amando” a su pareja, lo hacían
por otras razones. Si te casabas y eras feliz era cuestión de suerte y no de elección.
Dentro de la historia podemos
encontrar a un personaje que sobresale de los demás por su forma de ser,
Elizabeth. Ella es una mujer a la que le gusta leer, cuestionar y analizar las
cosas intelectualmente, además de que no está obsesionada con casarse, y si
algún día se llegará a casar, lo haría porque en verdad le ama, por su felicidad.
No es decir poca cosa, verdad. Es precisamente ella quien le da sabor a la
novela, pues, aunque en un principio parecería que es una historia de amor, las
intervenciones de ésta profundizan en cuestiones más complejas.
Orgullo y prejuicio fue una novela
que disfrute y deglutí con sumo placer, mientras tomaba mi café.