Lo que va a determinar que una persona
sea considerada normal dentro de un grupo, institución, sociedad, es la implementación
de ciertos parámetros, normas, modelos, que se utilizan para determinar un
estado ideal, natural, de las personas.
Con respecto a qué tan permisivos
somos con el comportamiento de otros, antes de considerarlos locos, creo que
tiene que ver con la forma de pensar de cada persona, pues habrá quien sea de
mente cuadrada y no tolere que alguien se salga de su visión, de su concepción,
muy seguramente, a la primera, mientras que otros comprenderán que los humanos
se comportan como un prisma.
Creo que los humanos tenemos
diferentes variantes de nuestra personalidad, y solemos sacarlas en
determinados momentos específicos, con determinadas personas. Así, cuando estamos
en el trabajo, transporte público, por ejemplo, nos comportamos con normalidad,
sin embargo cuando estamos con nuestros amigos, hermanos, mostramos nuestro
lado fuera de lo ordinario.
Cuando era niño deseaba que al
crecer, influenciado por la serie de televisión “Inspector Gadget”, transformarme en un inventor y crear un sinfín de
inventos, que me permitieran volar, tener un robot, tener dinero, tener súper
poderes.
Sin duda que he querido ser
detective, sobre todo después de leer una buena historia policial, negra, pero
parecido al personaje Guedes (creado por el escritor Rubem Fonseca), ya que él
comprende que la cárcel está hecha para los jodidos, que los ricos cometen
actos atroces y salen impunes, que los humanos a todo se acostumbran, es un sabueso,
es un tira derecho.
En relación a que si tengo algunas supersticiones
(sin duda que las tuve hace diecisiete años, romper un espejo, tirar sal, las mariposas
negras, brujería, el mal de ojo, etcétera),
vale la pena decir que con el paso del tiempo, a medida que reflexionaba, adquiría
conocimiento, éstas quedaron relegadas, perdieron su valor, quedaron obsoletas.
Desde luego que conozco historias
en donde el protagonista tiene alguna discapacidad, además de los personajes
que aparecen en la invitación a la lectura, como la película Mommy (la difícil relación
de una madre con un hijo que padece TDAH) de Xavier Dolan, La Tribu (un sordomudo
que ingresa en un internado, en donde se unirá a una especie de pandilla) de
Miroslav Slaboshpitsky, La teoría del todo (basada en la vida del astrofísico
Stephen Hawking, quien tenía ELA) de
James Marsh, Amigos (la amistad que surge entre un tetrapléjico y su cuidador)
de Eric Toledano y Oliver Nakache.
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