La historia de Pedro Paramo
es atemporal porque no se le puede atribuir a un tiempo determinado, los
tiempos tristes siguen tan vigentes como hace 50 años, es más, me atrevo a decir
que los tiempos tristes están más presentes ahora que hace muchos años. En la
actualidad muchas personas viven en una
soledad como la que se narra en la
historia. Los tiempos avanzan sin sabor y, pareciera, que los días están
teñidos de un color opaco por tanta tristeza transpirada, la ciudad está
enferma como el pueblo de Comala.
Hasta el momento han
aparecido tres narradores. En primer lugar, tenemos a Juan Preciado, quien nos
describe como es Comala. En segundo lugar, tenemos a Eduviges Dyada, quien
recibe a Juan Preciado y le da hospedaje, al mismo tiempo que nos cuenta un
poco de la historia de Dolores y Pedro. Por
último, tenemos a Pedro Páramo, quien nos narra partes de su infancia, además de
mostrarnos sus sentimientos por Susana.
Rulfo eligió transportarnos
del presente al pasado y viceversa, porque tenía la intención de mostrarnos un
lugar en donde pasado y presente se entrelazan, dando como resultado un lugar
en donde las historias pueden mutar de un instante a otro. Existe un lugar así
y está en nuestro cerebro, pues podemos transportarnos al pasado y revivir
momentos que sucedieron muchos años atrás, o podemos vivir el presente, aunque
se dice que el presente depende del pasado.
Se dice que el infierno es
un lugar, en donde después de la muerte los condenados son sometidos a un
castigo eterno. Comala me parece un lugar similar, ya que las personas o entes
que lo habitan, están condenadas a permanecer en ese lugar hasta la eternidad.
Pero me resulta muy complicado y aterrador
entender que exista un lugar así, ya que considero que después de la
muerte no hay nada.
Nos damos cuenta que las
personas de la historia ya están muertas por indicios que nos dan ellas mismas,
también por lo que nos dice Juan Preciado, pues él nos dice que ya sólo quedan
hebras humanas en ellos y ellas. Juan reacciona con temor al percatarse de que
las personas están muertas, y es normal, pues todos reaccionamos de la misma
manera ante lo desconocido.
Cuando llega a Comala
empieza a percibir cosas muy extrañas, como por ejemplo, ve aparecer y
desaparecer gente, escucha voces de personas, perros ladrar, etc. Creo que Juan
percibe estos sucesos extraordinarios porque se adentro al mundo de los
muertos y, antes de poder descansar debe cumplir la promesa que le hizo a su
madre. Juan está muerto desde el inicio de la historia pero el no se ha dado
cuenta.
Dolores espero hasta su
muerte para hablarle a Juan Preciado de su padre, porque necesitaba sacar todos
los sentimientos que tanto tiempo la
habían carcomido por dentro. Necesitaba desprenderse del peso que yacía sobre su
alma, para poder descansar sin culpa alguna.
Me parece que Pedro es una
persona con diferentes facetas, como muchos de nosotros. Si bien, conforme va
creciendo va mostrando cada vez más un lado egoísta y malvado, podemos leer
que en su niñez poseía un poco de inocencia que caracteriza a esa etapa de las
personas.
Pensaba
en ti, Susana. En las lomas verdes. Cuando volábamos papalotes en la época del
aire. Oíamos allá abajo el rumor viviente del pueblo mientras estábamos encima
de él, arriba de la loma, en tanto se nos iba el hilo de cáñamo arrastrado por
el viento. ‘Ayúdame, Susana.’ Y unas manos suaves se apretaban a nuestras
manos. `Suelta más hilo’.
El
aire nos hacía reír; juntaba la mirada de nuestros ojos, mientras el hilo
corría entre los dedos detrás del viento, hasta que se rompía con un leve
crujido como si hubiera sido trozado por las alas
de un pájaro. Y allá arriba, el pájaro de papel caía en maromas arrastrando su
cola de hilacho, perdiéndose en el verdor de la tierra.
“Tus
labios estaban mojados como si los hubiera besado el rocío”.
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